No podía seguir allí, su
condición la había aislado y, en soledad, había ido transitando en su vida
sorteando infinidad de obstáculos y sabía que su futuro le presentaría más obstáculos
cada vez más complicados, cada vez más infranqueables. Y sola, siempre sola
rodeada de tanta gente, intensamente sola.
Hace poco sus padres llegaron a comprender
que lo de su hija no era bueno ni malo, sino fruto de la naturaleza. Algo que
no remediarían medicinas, ni conjuros, ni castigos. Y también comprendían que la
gente no lo entendiera, a ellos mismos les había costado. O que sintieran
repulsión, ellos la habían sentido. Lo que no entendían es que la justicia malgastara
sus pocos medios persiguiendo a personas inofensivas cuyo único delito era tener
alguna característica diferente.
Aquel era el día. Aquella la
hora. La vuelta atrás imposible pues la decisión era firme.
Ella se abrazó a su madre y aunque
hablaran sobre un próximo encuentro, ambas sabían que la separación sería,
seguramente, definitiva. Por eso no querían romper esa cercanía que desde que una
era bebé y la otra madre, nunca habían tenido. Cuando se separaron, la madre la
santiguó
Se abrazó a su padre, seguramente
por primera vez en su vida. También corrieron las lágrimas por las caras de
ambos y el abrazo se prolongó, porque él quería seguirla protegiendo, porque a
ella le confortaba sentirse protegida antes de emprender un viaje que los dos sabían
que muy difícil y sufridamente llegaría a término.
Con la cabeza baja, cargando una pequeña
maleta que contenía alguna ropa y pocos recuerdos, fue haciéndose pequeñita
según avanzaba cuesta arriba, rumbo a la estación, donde tomaría al autobús que
la llevaría en el primer tramo de un largo viaje, cruzando sola, absolutamente
sola, medio continente, hasta llegar a la Europa de las libertades, donde
esperaba poder continuar su vida libre de obstáculos.
Este relato es un homenaje a cuantas personas pierden su preciosa vida con destino a una ilusión, También lo es este dibujo, realizado por un alumno de la Escuela Elemental de Lampedusa.
Otros relatos sobre la despedida en el blog de Pepe.
Otras visiones de soledad en las palabras de Sindel.
26 comentarios:
Un precioso relato, qué triste son las despedidas, sobre todo si se despide a un hijo...
Bonito dibujo de tu alumno.
Muchos besos
Hay despedidas que no deberían producirse nunca...o cuanto menos no ser definitivas...
Emocionante, aunque duro, muy duro en el fondo...
Es un relato fuerte Juan Carlos, nunca es alegre tener que cambiar el rumbo a la fuerza, ni dejar atrás nuestras raíces, pero más doloroso es ser perseguidos por pensar o ser diferentes. Una despedida que duele, y ojalá sea para un comienzo de algo mejor.
Te felicito por la unión de las dos propuestas, como dicen ustedes, lo has bordado.
Un abrazo enorme.
Me olvidaba de decirte que me encantó el dibujo!
Que triste son las despedidas sobre todo en estas condiciones.
Me gusto tu relato, es muy profundo
Un beso
Isa
Las despedidas, por lo general, son tristes y llegan. Me ha giustado tu relato y sobre todo el dibujo que lo adorna.
Una dolorosa despedida, en busca de nuevas aventuras. Sin saber que depara el destino, y que fatalidad para aquellos que jamas podran regresar. Un super hiperestésico relato, Juan Carlos. Una creacion genial con la mezcla de las dos palabras.
Un abrazo
Buenos dias Juan Carlos: Has estado muy acertado en tu post,con la mezcla de las dos palabras de esta semana. Supongo que te ha influenciado, el drama de los inmgrantes muertos en las aguas mediterráneas. Tot un drama humano.
Abrazos para tí y tu preciosa familia.
Un recuerdo para aquellos que se han ido sin poder despedirse y han dejado a los suyos en la mas triste soledad. Los niños siempre nos dan lecciones. Un abrazo
Me has tenido el alma encogida desde que empecé a leer tu relato
Un relato profundo que me ha conmovido.
Hermoso y triste a la vez.
Un abrazo
Triste pero real como la vida misma. Esta sociedad es injusta de verdad.
Un abrazo
Un gran relato homenaje muy sentido Juan Carlos.....
Un relato muy actual que no despliega su trágico significado hasta el final manteniendo esa incógnita hasta descubrir cual es realmente ese triste destino. Pero realmente lo triste de no esa despedida sino la falsa ilusión de futuro y los motivos que generan esas despedidas.
Un relato muy actual que no despliega su trágico significado hasta el final manteniendo esa incógnita hasta descubrir cual es realmente ese triste destino. Pero realmente lo triste de no esa despedida sino la falsa ilusión de futuro y los motivos que generan esas despedidas.
felicitaciones por el texto
Conmueven todas esas vidas perdidas que huyeron de lo oscuro para caer en lo oscuro.
Buen homenaje, que me ha hecho reflexionar.
Y el dibujo es una joyita.
Un abrazo :)
Ser diferente es el primer barrote de una cárcel que nos encierra toda la vida... incierto futuro es el que cabe en la maleta.
Un beso
Un relato conmovedor... triste... pues todas las despedidas lo son pero la de un hijo debe ser la peor... sobre todo cuando como en tu final su futuro es incierto....
Hermoso dibujo el que acompaña tus letras!
Muchos besinos...
Sigo soñando un mundo en que las diferencias, sean las que sean, no resulten estigmatizadas, donde las fronteras no sean sino separaciones geográficas simbólicas, sin rejas ni muros, donde todo ser humano tenga derecho a ser respetado sin exclusión alguna.
Cuanta locura y cuanta vida segada esconden esos mares a los que se arrojan en cualquier cáscaron que pueda llenarles de ilusiones de un futuro prometedor.
Es tremendo que no se corte el flujo de muertes. Algunos perros se estan comprando collares de diamantes con la sangre derramada de los seres humanos que tienen que pasar por esas situaciones.
Siempre el dinero, el egoismo humano no tiene fin querido amigo.
Perdona mis ausencias Juan Carlos y abraza a toda la familia con el cariño que os tengo. Besos y sonrisas a tu Nano.
Muy hermosas y sentidas tus palabras, que hacen un homenaje a todas esas personas que se aventuran a cruzar el mar para buscar una salida a su vida en soledad.
Besos
Un homenaje a tantas personas que se marchan presas de la desesperación en busca de un lugar donde poder vivir, Dejan atrás todo cuanto aman y en ese viaje esperanzador pueden perder hasta la vida. Muy bien dibujada la situación Juan Carlos.
Un abrazo.
Buenas tardes, Juan Carlos:
Un gran relato, enhorabuena.
Muchas veces pensamos en los inmigrantes como personas que huyen del desarraigo, como prófugos de la desesperación que no dejan nada atrás y a los que impelen unas necesidades económicas.
Se nos olvida que la mayoría dejan atrás seres queridos; y que se alejan de ellos forzados por una necesidad que, con sus urgencias económicas, tiene mucho de un querer vivir en una libertad. Tu texto nos habla de esas personas que se empequeñecen al alejarse de los suyos y que se acercan a nosotros buscando vivir en libertad.
Gracias, Juan Carlos.
Triste estar rodeados de gente y sentir la soledad, un relato muy triste, duro
un beso Juan Carlos
El relato que compartes es impecable, la realidad que describe, dolorosa.
Queda esa sensación desoladora de impotencia y cuestionamiento. En este mundo, muchas son las cosas que van muy mal, lamentablemente.
Besos amigo, y buen comienzo de semana!
Gaby*
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